El Homo Erectus. Así fue su paso por la Tierra
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Si estamos aquí es porque nuestra especie ha recorrido un camino de cientos de miles de años en este planeta, evolucionando y sobreviviendo hasta convertirse en la más importante de todas las especies, o al menos, en la que ha logrado controlar su estancia en el planeta y adaptarlo a sus necesidades. Para llegar a nosotros, a los homo sapiens, nuestra especie tuvo que pasar muchos cambios y uno de los más importantes se dio hace aproximadamente dos millones de años con la aparición del homo erectus, conocido así por su postura erguida, siendo el primero en caminar de esa forma, sin utilizar sus extremidades superiores, como hasta ese momento lo hacían sus antepasados.
El homo erectus es una evolución mucho más inteligente y robusta que los homo habilis, sus anteriores antepasados en la cadena evolutiva de los homínidos. Gracias a ganar en fuerza y robustez, pero sobre todo en inteligencia, con un cerebro más desarrollado, el homo erectus pudo evolucionar mucho mejor y crear nuevas formas de protegerse ante los peligrosos depredadores que todavía invadían nuestro mundo. Esa mezcla de inteligencia y fuerza le hizo casi invencible, y gracias a ello hoy estamos aquí, después de haber pasado también por el hombre de neandertal, hasta llegar al homo sapiens.
Cuándo y dónde vivió el Homo Erectus
El homo erectus es una especie de homínido que supuso el paso intermedio entre el homo habilis y el homo neandertalis. Se estima que, como los habilis, su primer hogar en la tierra fue África, y que a partir de ahí comenzó a desplazarse hacia otras zonas como Europa y Asia, en donde consiguió hacerse con el dominio de las tierras gracias a su mayor fuerza y su inteligencia privilegiada en comparación con sus coetáneos. Este homínido hoyó nuestro planeta en un periodo comprendido entre haca 1,9 millones de años y hace 70.000, un periodo de cientos de miles de años en los que esta especie también fue evolucionando hasta dar con el Homo Neanderthalis y posteriormente con nuestra propia especie, el Homo Sapiens.
Cómo era su estilo de vida
El homo erectus tiene tanta importancia en nuestra evolución porque logró muchos avances “tecnológicos” que le permitieron vivir más y mejor. Se mantenía como una especie nómada, aunque es cierto que podían levantar diferentes asentamientos en ciertos lugares. Recolectaban fruta y verdura, un trabajo que pasaría a las mujeres cuando los hombres comenzaron a dedicarse a la caza como principal modo de vida. Eran también los encargados de proteger a los grupos y familias de los depredadores, para lo cual lograron crear diferentes herramientas como lanzas, palos y espadas, que mantenían a raya a estos peligrosos animales.
Sin embargo, el cambio más importante seguramente se daría cuando el homo erectus descubrió la manera de hacer fuego, algo que cambió sin lugar a dudas su forma de entender el mundo. No solo ganó en protección frente a los animales, sino también en calidad de vida, para protegerse del frío y para cocinar los alimentos. El descubrimiento se data en unos 400.000 años atrás, y fue también determinante para que el erectus diera paso, miles de años después, al homo neandertalis.
Inventos y aportaciones
Como decíamos, el Homo Erectus se convirtió en dueño y señor de casi todas las tierras donde llegaba gracias a la forma en la que consiguió malear su medio ambiente para su propio beneficio. Comenzó haciendo herramientas con roca, para pasarse después también a malear la madera y utilizar todo ello para defenderse e incluso atacar. La caza se convirtió en una actividad muy importante, gracias a que ahora sí que contaba con medios para poder derrotar a sus depredadores. Y por supuesto, la invención del fuego también ayudó muchísimo en este aspecto, porque contaba con una ventaja evolutiva absoluta frente al resto de especies.
Su relación con los demás y con el entorno
Cuando el homo erectus se mantenía en un lugar durante un tiempo construía casas muy básicas pero funcionales, no solo con piedras, sino también chozas de madera y paja, con otros materiales que eran mucho más fáciles de encontrar y de elevar, para poder moverse de un sitio a otro. Todo aquello cambió la forma de vida de esta especie para permitirles vivir mucho mejor y acomodarse más rápidamente al entorno, lo que facilitó su evolución y el hecho de que llegaran más allá que sus antepasados en todos los sentidos.
Consiguieron mantener a raya a los depredadores y llegaron incluso a acabar con otras especies de homínidos. Empleaban sus herramientas para cambiar el entorno y adaptarlo a sus necesidades por completo, y así poder vivir de una manera mucho más segura y cómoda. El fuego fue el punto de inflexión absoluto, porque les permitió acceder a un tipo de conocimiento diferente y especial. Así fue hasta que desaparecieron de la faz de la Tierra, tal vez por culpa del homo neandertalis, del sapiens o por cualquier catástrofe natural, algo que todavía no está corroborado al cien por cien.